Las pymes españolas ya no son lo que eran. Según cifras de la consultora Everis, el 90% de las pequeñas empresas y cerca del 60% de los autónomos disponen de banda ancha fija en su día a día.
Pese a este rápido avance, la asignatura pendiente sigue siendo las tecnologías que posibilitan el ahorro. Este problema, en tiempos de crisis, se ha convertido en una cuestión de supervivencia para muchos negocios.
Las pymes españolas no lo tienen fácil para invertir grandes cantidades en tecnología, aunque ésta pueda ser la solución perfecta para ver la luz al final del túnel de la recesión.
¿Un problema de bolsillo o de mentalidad? Los expertos apuntan a una conjunción de ambas cosas, si bien la primera, gracias al denominado software libre y a la externalización de servicios, se hace más fácil de sobrellevar. “Se trata de un conflicto de modelos mentales, ya que para introducir tecnologías, hay que modificar procesos, la forma de trabajar, las estructuras organizativas y la relación con el entorno emprearial”, apuntan fuentes del sector.
En este contexto, el software libre se presenta como una buena alternativa. Se entiende como software libre, o informática de código abierto, aquélla por la que no se paga una licencia. Los costes vienen derivados del posible desarrollo a medida de ciertas soluciones específicas y del soporte técnico. “En España, existe una oferta bastante variada y, por lo general, de buen nivel”, señala Pablo Ruiz Muzquiz, director de Free & Open Source de la consultora española Entel. “Como en todo, hay productos muy malos y profesionales poco fiables, pero las empresas más maduras ofrecen niveles de soporte técnico y de seguridad altísimos”, asegura Ruiz Muzquiz.
Artículo de Expansión.